La obra fotográfica que compone la muestra Nítido de Abraham Chinchillas puede definirse como sugestiva y desconcertante a la vez. Una imprevisible mezcla de invención, juego y goce es el resultado de imágenes fotográficas obtenidas de manera digital, donde la luz se convierte en un mero pincel al servicio de la búsqueda de reinterpretar lo cotidiano.
Imágenes abstractas de composiciones experimentales, que transcienden de lo usual para tomar vida propia y forma parte de un mundo onírico, en el más puro estilo surrealista, en el que las cosas no son lo que son. No se trata de fotografiar la realidad sino de recrearla. Chinchillas ejecuta una sinergia vivificante entre su propuesta visual y su noción poética.
A través de imágenes como las que el espectador disfrutará en la presente muestra, es posible determinar los nuevos sentidos que genera actualmente la práctica fotográfica, a fin de tener una mejor comprensión de los procesos de significación de la cultura contemporánea frente al mensaje fotográfico.
Imágenes abstractas de composiciones experimentales, que transcienden de lo usual para tomar vida propia y forma parte de un mundo onírico, en el más puro estilo surrealista, en el que las cosas no son lo que son. No se trata de fotografiar la realidad sino de recrearla. Chinchillas ejecuta una sinergia vivificante entre su propuesta visual y su noción poética.
A través de imágenes como las que el espectador disfrutará en la presente muestra, es posible determinar los nuevos sentidos que genera actualmente la práctica fotográfica, a fin de tener una mejor comprensión de los procesos de significación de la cultura contemporánea frente al mensaje fotográfico.
Juan Carlos Valdez
Abril 2009